jueves, 24 de junio de 2021

Excedent

Soc sempre massa per ser ara.
Soc per ser quan nevi, quan plogui;
per quan tot sigui sencer,
la millor aposta per un futur inassolible
que en l'ara no vols desbaratar
mentre en cada renúncia perds
l'oportunitat flagrant de l'ara.
Soc per quan siguis, quan tinguis, quan entenguis.
Soc amb una enganxina d'obrir en cas d'emergència.
Soc massa per l'ara,
com totes aquestes coses que omplen
armaris, neveres i rebosts
"per si de cas un dia".
En aquesta successió continua d'aras,
tria'm ara per si de cas just aquest ara
esdevé aquell sagrat dia
per el que no gaudeixes la immediatesa
per si de cas un altre futur arriba.

domingo, 2 de mayo de 2021

Buganvilla


A veces pienso en qué diría Mercedes
cuando me subo a un escenario,
cuando itero en los vórtices de las imposibilidades,
cuando me aferro a plantas enraizadas en precipicios.

A veces imagino que me mira 
desde palcos de teatros,
escaleras de gradas de pabellones, 
laterales de salas,
escalones y bancos de calle.
La veo en sillas cómodas de bares
con una copa de vino y un cigarrillo,
en espaldas que caminan con decisión
de plumas rubias decaladas.

A veces pienso qué dirá desde su altar doméstico
cada vez que alguien nuevo cruza la puerta.

A veces me habla con otras voces,
a veces también con la mía.

Y volviendo a casa un día,
una buganvilla de hojas grandes y flores rojo-fucsia
me miró mientras escuchaba un tango
y cuando pregunté cuánto costaba
y me dijeron el precio,
en mi cabeza, en un mundo paralelo,
yo, mirándola a las flores y bridas
de los palos que la sostenían,
le preguntaba “¿cómo te llamas?”
y me respondía: “Mercedes”.

domingo, 4 de abril de 2021

La arquitectura del borde

Estando un día la señorita Perla en una casa llena de Argentina aprendió que el repulgue era la técnica que cierra las empanadas y la bautizó como "arquitectura del borde". La señorita Perla olvidó este significado poético hasta que al día siguiente se lo recordaron y de ahí surgió este texto. 

Tengo una inercia inevitable de buscar metáforas vitales a las cotidianidades. Las empanadas contienen cantidades variables de relleno, igual que las personas contienen cantidades de vida, porciones de ejes vitales, porciones de elementos que constituyen el entramado vital compartido. 

Y ahí está, el relleno cocinándose con toda esa combinación de elementos en diferentes recipientes con ingredientes que se van sumando de diferentes fuentes y momentos. Y la vida se va sucediendo en diferentes segmentos, trozos de línea argumental acotados, acotados como lo está la propia existencia, contenedores y segmentos de vida. Empanadas de vida. Toda la vida que pueda contener una oblea, con todo lo elástico y versátil de una oblea aún siendo industrial. La unión de un paquete industrial de obleas puede construir una oblea gigante aún no siendo artesanal. 

Y ahí está la vida en cazuelas, ingente, al fuego. 
Y obleas y bandejas para contenerla, para hornearla, para comérsela. 

Eliges una cantidad de relleno de vida que no desborde, que no te venza demasiado el ansia, tanto puedes contener horas o años con una misma proporción de materia. Después cierras con cuidado, con el agua que activa el cierre, estirando para tener geometría en el espacio sobrante; y con un gesto hábil de pulgar e índice, cierras. 

Con esa arquitectura de borde como si fuera una cuerda, con cuidado de no romperla para que después de hornearla relleno y masa, vida y segmento, sellen y afiancen el repulgue y después, acaben nítidas almacenadas por impulsos sensoriales en el archivo gastronómico de la vida.
 
Los momentos de la vida, como este, son empanadas bien repulgueadas.

martes, 23 de marzo de 2021

El amor que tú dices

Si esto fuera el amor que tú dices sería una plañidera anestesiada de Diazepam, velando el féretro con los ojos perdidos en una ventana de barrotes y llevando el luto translúcido de las catástrofes adheridas.

Si esto fuera el amor que tú dices me pesarían las agujas del reloj en la muñeca, cada giro de manecillas giraría sutilmente el torrente sanguíneo, no habría respuesta al pulso y las pupilas quedarían estáticas en un Glasgow 3 profundo.

Si solo una de las acepciones fuera el amor que dices y me asignas, el lugar en el que me crucificas y relegas, no podría seguir escribiendo, la tinta se emborronaría y no podría seguir leyendo.

Pero sucede que este amor que tú dices es una versión del cuento de hadas, es la piedra Rosetta en su atmósfera protectora, es Pompeya sepultada y congelada pero no es hoy, ahora, ni aquí; es en la narrativa ajena adquirida.

Si esto fuera el amor que yo digo dejaríamos líneas de textos entre cortinas, salivas y sábanas y nos inventaríamos un segmento que acotara al resto de nuestras vidas y ahí, en esa inmediatez de constante acotación, te diría que veto todos los tiempos pretéritos y futuros para que me dejes quizás un croissant, un zumo de naranja y una flor.

lunes, 8 de marzo de 2021

Esquitxos

Només vull un esquitx de desig que em sacsegi el fetge.
Una caixa de mistos esclatant només tocar-la
i ser foc, foc i fusta i herbes seques cremant-se
i escampant totes les cendres.

Esquitxos de desig sacsejant-me el fetge,
a mi que fujo del tòpic,
a mi que no crec en obvietats
ni en massa d'hores o massa tards,
a mi que no entenc de lleis.

Sóc salvatge amagada sota transparències,
sóc el peatge del Teletac
que obre un clic de matinada.

Vull encendre la paraula que duu la flama,
vull els ulls que es queden enganxats
mentre combustiona el centre de l'univers
i es desfà el magma en onades harmòniques,
vull la mossegada del mirall extenuada
i el tacte que evoca la foguera,
i els dits socarrats que contenen la bèstia
del desig que sacseja el fetge
de l'esquitx de tu que encara em desitja

viernes, 1 de enero de 2021

Posibilidad

La única realidad que podemos ser 
con seguridad es posibilidad. 

La posibilidad es.
Es en su incertidumbre, 
es en sus variables, 
es con geometría exacta. 
Cambiar de año es 
sólo un segundo que, 
como cualquier otro, 
tiene la posibilidad 
de cambiar el mundo. 

La posibilidad es este segundo.